Movida por una llamada interior, comencé el camino del hatha yoga y meditación con mi primer curso de Yoga en Colombia.

En 2008 estudié un año de formación de maestros de Hatha yoga en Barcelona. Pero sólo cuando conocí el camino del Advaita Vedanta gracias a Swami Satyananda Saraswati, me di cuenta de que el yoga más que una práctica era un conocimiento experiencial, que se puede reconocer en el silencio, en el aqui y ahora. Empecé a estudiar la filosofía clásica del yoga, la meditación, las bases del Hinduismo, el Advaita Vedanta y el Shaivismo de Cachemira, todas ramas de un mismo árbol, el Sanatana Dharma o Hinduismo bajo la guía de un maestro. Desde aquí y bajo su guía he asistido a seminarios y retiros sobre: los sutras de Yoga de patañjali (2 años), Los bhakti sutras de Narada, la katha upanishad, la bhagavad gita, los Shiva sutras, el paramarthasara, el atma bodha, el pratyabijñahrdayam y el vivekachudamani entre muchos otros.

Después de ser madre decidí dar este gran paso en mi vida cambiando el trabajo de arquitecta y en 2014 comencé una tercera formación de Hatha yoga en Yogalife Bélgica. Y fue después de esta formación que decidí enfocarme en solo compartir el conocimiento del Yoga.

En 2015 me formé en aromaterapia y yoga: Aroma Yoga. En 2019 acabé la formación de “Ayurveda para profesores de Yoga” con Kaivalyadhama en India. En 2021 acabe la formación, de Vastu vidya para la armonización de los espacios, etc, etc, etc.

Todas estas formaciones en realidad buscando a lo divino, un deseo que me acompaña desde muy niña y que empezó a la edad de los 9 años cuando me inicié en mis prácticas espirituales, en esta época, más de meditación y devoción. La conexión con lo divino siempre ha sido mi meta incluso en mis estudios de doctorado y armonización del hogar, La casa es una extensión de nosotros mismos y es el mapa físico que nos puede ayudar a equilibrar nuestra mente, emociones y unión a lo divino muy rápido.